Si tienes un sitio web personal y una popularidad bastante
establecida, fácilmente podrías tener una campaña de base que
podría influir en la opinión pública.
Hay muchos ejemplos de esto en la actualidad, y si tienes
intereses políticos, seguramente has visitado algunos de estos blogs.
Si no te interesa, puedes encontrar enlaces a estos blogs
en CNN u otro sitio de noticias, o busca en Google blogs políticos.
Sin citar ejemplos específicos, la prensa ha llegado a entender el
poder de los blogueros durante las últimas elecciones
presidenciales en los Estados Unidos.
Los blogueros prestaban atención a las diferentes esferas políticas
y publicaban opiniones acerca de los temas que presentaban los
candidatos. A veces eran directamente preguntas y si el candidato
los ignoraba, la respuesta era abrumadora, y tenían que ver cómo
su intención de voto bajaba drásticamente.
Para ser justos, no se trata solo de los blogs; también incluye a
todos los sitio de la Web 2.0 que pueden lograr que cualquier cosa
se vuelva viral en un instante. Un candidato tuvo que bajarse de
la carrera para senador porque se enojó con los objetantes y se
expresó de una manera vulgar en un mitin; fue allí que un
bloguero vio lo que sucedió, publicó una nota sobre eso, y también
subió un video en la red YouTube.
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